20.1.10

Vicios

Todos tenemos un vicio: los más comunes, obviamente, son fumar, beber, hablar mal de la gente o ver pornografía. Y ni levanten las cejas, ustedes lo saben bien.

Mi vicio son los libros.

No leerlos, claro que no. ¿Por qué los leería? Eso me quitaría tiempo de... buscar otros libros. Sí, yo pertenezco a esa rara especie de gente que se va a las librerías nuevas o de viejo y se está horas y horas frente a un solo exhibidor repasando los títulos, leyendo contraportadas, imaginando lo que dicen los libros. Pero como todos los vicios, tengo mis resquemores y manías.

Porque el título "La Insoportable Levedad del Ser" me pareció genial, conocí a Kundera, y casi consigo conocer a Satre, de no ser porque "El Ser y la Nada" es el peor primer libro del filósofo para alguien que tiene su educación bien cimentada en los preceptos del canal "de la gran familia mexicana".

Ahora me paso leyendo sobre libros en internet: espío lo que otros blogueros leen, lo que los twitters mencionan, recorro artículos enteros de Wikipedia buscando referencias bibliográficas. Algunos no los encuentro en mi pueblo (Anagrama, por ejemplo, es difícil de conseguir, ya no digamos carísima), los busco incansablemente en Internet. Los bajo a mi disco duro, los almaceno en carpetas imposiblemente chonchas, en memorias USB y los paso pacientemente a presentaciones de Power Point para poderlos leer mientras estoy en el trabajo, pretendo que sí, que en realidad preparo la presentación número mil quinientos dos millones tres sobre "ecología", pero en el fondo me solazo en las descripciones que hace Orwell en la distopía favorita de todos: 1984.

Sigo a las editoriales, entro a páginas web de escritores, odio sin conocer a algunos tan sólo porque sus historias me parecen pueriles, a otros los idolatro en silencio. Leo muy bajito algunos pasajes para mí, y otros los transcribo en libretas que deberían contener reportes contables o estrategias de mercadotecnia.

Mi vicio son los libros, no leerlos, sino recorrerlos, encontrarles los recovecos, mirar sus páginas virtuales o en papel, ensoñarme en descripciones ilógicas a problemas insolutos.

¿Moriré?


3 comentarios:

Rodion dijo...

Huy, me hiciste medir mi carpeta de cosas por leer que snobmente se llama "to read" tiene sus 3.8GB de cintura... a ver si quieres algo

Anónimo dijo...

solo espero que todos esos libros electrónicos hayan sido descargados legalmente

Jan de la Rosa dijo...

Moriremos