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Óquei: no entraré al Script Frenzy este año. He decidido que estoy demasiado ocupada y que mi mente de chorlito no da para mucho.

Subí cuatro kilos cuatro y ahora peso de nuevo 59. Y lo odio y dedicaré todo momento libre que tenga a evitar ingerir alcohol, grasas y a hacer cantidades exhorbitantes de ejercicio.

Además de que se atraviesa la semana santa y eso implica dos fines dos de semana menos: uno antes y otro después, y las horas que podría emplear en estar sentada frente a la computadora jalándome los pelos de exasperación ante mi falta de creatividad, lerdez y poco entidimiento de las letras latinoamericanas modernas las dedicaré a poner cara de circunstancia a saber en una boda y en la huasteca potosina.

Bueno, eso si la invitación de mi flamante novio sigue en pie, porque claro que ha de estar con los pelos de punta por mi falta de seriedad para la relación. Ash, soy más mala que la carne de cerdo en cuaresma, deberían prohibirme, ya.