Por esta ocasión

Las vacaciones van más o menos así:

• Salí el sábado a las 7,30 a.m. de mi casa para ir a cargar gasolina - recuerden que el plan A era salir a las 6.00 -, sólo para darme cuenta que había olvidado la tarjeta de circulación nueva. Sí lo sé, uno paga esas cosas y debe "isofactamente" colocarlas en la guantera junto a todos los demás documentos relevantes. Pero como me da tirria pagar tenencia, decido maximizar el uso de la tarjeta de circulación anterior. Yo pienso de mí, algo muy parecido a lo que ustedes se imaginan, pero trato de ignorarlo.
• Llegué a Zacatecas alrededor de la una de la tarde y alcancé a mi madre en el hospital, antes de que entrara a consulta con el doctor. El doctor llegó a la conclusión de que todo marcha más o menos bien (más que menos, por cierto) y decidimos regresar a vivir a la casa de mi mamá.
• Es lindo tener mamá en casa y no sentirse exiliada cada vez que visitas el pueblo ante el abandono de tu propio hogar.
• La casa de mi mamá está en venta.
  
• El carro de mi mamá está en venta.
  
• La hija única de mi mamá está en venta.
  
• Ok, yo no estoy en venta, pero últimamente a mi mamá le ha dado por venderlo todo y tan repentinamente que no me extrañaría para nada de pronto ver atada a mi muñeca izquierda una etiqueta que especificara valor monetario y reestricciones alimenticias.
  
• No son muchas, mientras haya queso soy feliz.
• Me he dedicado a las vueltas cotidianas que cualquiera que se haya pseudo mudado de casa en alguna ocasión ha hecho: comprar mandado, limpiar la casa, comprar agua, etc.
• El clima ha estado excelente, desde lluvias ligeras y bajas en las temperaturas hasta ese viento benevolenete que da a todo su justa dimensión. Es una lástima haber comprobado que esto ya no se siente como el hogar.
  

Mis vacaciones me contrarían.